La verdadera historia de los Reyes Magos y la magia de esa noche.

Esta noche es sin duda la noche más mágica del año para todos aquellos niños y como no, para aquellos mayores que tenemos hij@s. La verdad es que sería perfecto que durase para siempre, pero no es así, por ello os vamos a contar una historia perfecta para que contéis a vuestros hij@s cuando descubran la verdad sobre esta noche y que al mismo tiempo les sirva para no sentirse defraudados. Ahí va:

La verdadera historia de los Reyes Magos

 Raúl de 9 años llega con carita de pena a su padre y le dice:

– ¿Papá?

– Sí, hijo, dime

– Oye, quiero… que me digas la verdad.

– Raúl, hijo, sabes que intento no mentirte nunca.

– Ya, pero es que no se como decirte esto…

– No te preocupes hijo, empieza por el principio.

Hijo pensativo

– Papá, ¿existen los Reyes Magos?

La sorpresa del padre y la madre de Raúl fué tal que antes de contestar Raúl le dijo:

– Mis amigos dicen que son los padres. ¿Es verdad?

La nueva pregunta todavía lo dejo más boquiabierto y tragando saliva, dijo:

– A parte de lo que digan tus amigos, ¿tu que crees?

– Yo no se, papá: que sí y que no. Por un lado me parece que sí que existen porque tú no me engañas; pero por otro lado…

– Mira, hijo, efectivamente son los padres los que ponen los regalos pero…

– ¿Entonces es verdad? -cortó Raúl con los ojos humedecidos-. ¡Me habéis engañado!

– No, mira, nunca te hemos engañado porque los Reyes Magos sí que existen -respondió el padre cogiendo con sus dos manos la cara de su hijo.

– Entonces no lo entiendo, papá.

– Siéntate, y escucha esta historia que te voy a contar porque ya ha llegado la hora de que puedas comprenderla, sólo a cierta edad se puede contar -dijo el padre, mientras señalaba con la mano el asiento a su lado.

Raúl se sentó entre sus padres ansiosa de escuchar cualquier cosa que le sacase de su duda, y su padre se dispuso a narrar lo que para él debió de ser la verdadera historia de los Reyes Magos:

Cuando el Niño Dios nació, tres Reyes que venían de Oriente guiados por una gran estrella se acercaron al Portal para adorarle. Le llevaron regalos en prueba de amor y respeto, y el Niño se puso tan contento y parecía tan feliz que el más anciano de los Reyes, Melchor, dijo:

Los 3 Reyes Magos

– ¡Es maravilloso ver tan feliz a un niño! Deberíamos llevar regalos a todos los niños del mundo y ver lo felices que serían.

– ¡Oh, sí! -exclamó Gaspar-. Es una buena idea, pero es muy difícil de hacer. No seremos capaces de poder llevar regalos a tantos millones de niños como hay en el mundo.

Baltasar, el tercero de los Reyes, que estaba escuchando a sus dos compañeros con cara de alegría, comentó:

– Es verdad que sería fantástico, pero Gaspar tiene razón y, aunque somos magos, ya somos ancianos y nos resultaría muy difícil poder recorrer el mundo entero entregando regalos a todos los niños. Pero sería tan bonito.

Los tres Reyes se pusieron muy tristes al pensar que no podrían realizar su deseo. Y el Niño Jesús, que desde su pobre cunita parecía escucharles muy atento, sonrió y la voz de Dios se escuchó en el Portal:

– Sois muy buenos, queridos Reyes Magos, y os agradezco vuestros regalos. Voy a ayudaros a realizar vuestro hermoso deseo. Decidme: ¿qué necesitáis para poder llevar regalos a todos los niños?

– ¡Oh, Señor! -dijeron los tres Reyes postrándose de rodillas. Necesitaríamos millones y millones de pajes, casi uno para cada niño que pudieran llevar al mismo tiempo a cada casa nuestros regalos, pero no podemos tener tantos pajes, no existen tantos.

portal del belem

– No os preocupéis por eso -dijo Dios-. Yo os voy a dar, no uno sino dos pajes para cada niño que hay en el mundo.

– ¡Sería fantástico! Pero, ¿cómo es posible? -dijeron a la vez los tres Reyes Magos con cara de sorpresa y admiración.

– Decidme, ¿no es verdad que los pajes que os gustaría tener deben querer mucho a los niños? -preguntó Dios.

– Sí, claro, eso es fundamental – asistieron los tres Reyes.

– Y, ¿verdad que esos pajes deberían conocer muy bien los deseos de los niños?

– Sí, sí. Eso es lo que exigiríamos a un paje -respondieron cada vez más entusiasmados los tres.

– Pues decidme, queridos Reyes: ¿hay alguien que quiera más a los niños y los conozca mejor que sus propios padres?

Los tres Reyes se miraron asintiendo y empezando a comprender lo que Dios estaba planeando, cuando la voz de nuevo se volvió a oír:

– Puesto que así lo habéis querido y para que en nombre de los Tres Reyes Magos de Oriente todos los niños del mundo reciban algunos regalos, YO, ordeno que en Navidad, conmemorando estos momentos, todos los padres se conviertan en vuestros pajes, y que en vuestro nombre, y de vuestra parte regalen a sus hijos los regalos que deseen. También ordeno que, mientras los niños sean pequeños, la entrega de regalos se haga como si la hicieran los propios Reyes Magos. Pero cuando los niños sean suficientemente mayores para entender esto, los padres les contarán esta historia y a partir de entonces, en todas las Navidades, los niños harán también regalos a sus padres en prueba de cariño. Y, alrededor del Belén, recordarán que gracias a los Tres Reyes Magos todos son más felices.

Cuando el padre termino de contar esta historia, Raúl se levantó y dando un beso a sus padres dijo:

– Ahora sí que lo entiendo todo papá. Y estoy muy contento de saber que me queréis y que no me habéis engañado.

Y corriendo, se dirigió a su cuarto, regresando con su hucha en la mano mientras decía:

– No sé si tendré bastante para compraros algún regalo, pero para el año que viene ya guardaré más dinero.

Y todos se abrazaron mientras, a buen seguro, desde el Cielo, tres Reyes Magos contemplaban la escena tremendamente satisfechos.

Regalos

Si te ha gustado esta historia y lo que significa, compártela y ayúdanos a difundirla para que ningún niño deje de creer en esta magia.

Consejos para pasar las mejores vacaciones con vuestros hijos

Las vacaciones estivales suponen pasar más tiempo con vuestros hijos, las que no trabajéis desde finales de junio que estaréis disfrutando más de ellos, pero las que lo hagáis suponemos que tendréis ganas de esas merecidísimas vacaciones que os permitirán pasar más tiempo con vuestros retoños.

En definitiva este mayor tiempo con ellos os va a permitir aparte de poder realizar más actividades con ellos, el poder hacer lo mismo pero con más calma, menos estrés y mayor dedicación. Así que aprovechad esa tranquilidad para estar más relajadas con ellos y disfrutarlos más.

Ahí van nuestros pequeños consejos.

Flexibiliza las rutinas, pero no las pierdas.

El cambio de horarios en vacaciones, supone un “no me ubico” para los niños, sobre todo si son bebes, así que flexibiliza las rutinas, pero intenta evitar en la medida de lo posible un cambio drástico en las mismas. Tu sabes que estás viviendo un periodo diferente, el bebé no. Si los hijos son más mayores, todavía la flexibilidad puede ser mayor, pero conviene explicarles que esa rutina se ve variada por ciertos motivos y explicarles cuales son.

Recréate leyéndole cuentos.

Si durante todo el año le lees cuentos a tu hijo, ahora puedes recrearte en ello y puedes incluso escenificarlos, “semi disfrázate” para cada cuento, a tus hijos les encantará. Si tienes más de un hijo, el mayor puede formar parte del cuento contigo, seguro que el bebé desde una maquita le encanta ver como sus papas y hermano le hacen una mini obra de teatro.

El momento del sueño en un viaje.

Si vais a salir de casa, bien para pasar varios días en casa de un familiar, bien porque tengáis planeado un viaje, recordad que el cambio de ubicación puede afectar a vuestros hijos, sobre todo si son bebés. Es conveniente mostrar a tus hijos la nueva habitación donde dormirán, explicándoles que este será su lugar de descanso durante los próximos días, si tu hijo es bebé obra de la misma forma, aunque no te entienda, le va a transmitir mucha seguridad que le enseñes la habitación, le hables de su nueva ventana, nueva cunita, y hagas referencia a objetos que le acompañarán en la habitación durante esos días.

¿Cómo viajar con ellos?

Muchas veces podemos elegir destino y otras por diferentes circunstancias no, si puedes hacerlo ponte en el lugar del bebé o niño, lo que para ti pueda ser muy atractivo, puede no serlo tanto para ellos, así que antes de planear las vacaciones piensa en las horas de viaje, el transporte que utilizaréis, etc, así que llévate juegos, peluches y todo lo posible para que el viaje de tu bebé sea lo más agradable posible. Otra opción es aprovechar sus momentos de sueño para realizar ese viaje. Recuerda también llevarte contigo Un Bolso Maternal  donde poder llevar a mano toallitas, chupetes, biberón, etc, así como sombrillas para proteger al bebé del sol. 

Aprovecha para dedicaros más momentos de contacto físico.

Nadie pone en duda los beneficios del contacto físico entre madre y bebé, así que aprovecha ahora que tenéis más tiempo para estar juntos, para darle masajes más duraderos, más tranquilos y disfruta de abrazarlo, besarlo y reírte con él. Si el niño es mayor esos masajes pueden ser mutuos, házselo tu primero y luego que te lo haga él, de así tienes tu también tu “momento relax”. Si tienes dos hijos, (según las edades)  puedes enseñar al mayor a que le haga masajes al bebé, al mayor le encantará y a su hermanito también. Aquí os pasamos un buen vídeo sobre como masajear al bebé.

http://youtu.be/O_uExygU4Dk

Bueno, estamos seguros que vosotras aprovecháis y hacéis mil cosas más con vuestros hijos durante las vacaciones, así que esperamos vuestros comentarios para poder compartirlos con las demás mamis.

Recordad que este blog pretende ser un nexo de unión entre mamás, así que todo lo que nos hagáis llegar luego lo compartiremos, vía entradas al blog, enlaces a facebook, etc.

Gracias a todas.