Hola Mamis,
Llegan los meses más duros de invierno y es normal que los más peques cojan más de un refriado y siempre y cuando estos no se compliquen en exceso no tenéis porqué preocuparos, ya que es algo normal en sus edades, pensad que cada uno de estos resfriados va fortaleciendo el sistema inmunológico de vuestro bebé.
Cuando el resfriado se complica es inevitable ir al médico y seguir las pautas que el pediatra nos ordene, pero cuando se trata de mucosidad y tos leve os vamos a pasar una serie de consejitos que ayudarán a que vuestro peque sobreviva a estos meses más fácilmente.
Ahí van estos consejitos y remedios caseros.
1. Eucalipto por la noche para que respire mejor.
Si ves que por la noche debido a la mucosidad le cuesta respirar, prepara un vasito de agua caliente en el microondas y cuando lo saques le añades un poquito de eucalipto, déjalo en un lugar cerca de su cama pero que no pueda toca y verás como respira mejor.
2. Cebolla partida en su habitación contra la tos y los mocos.
Si además de mocos tiene mucha tos también es beneficioso colocar ne la habitación un cebolla partida durante toda la noche, ahora bien, recuerda al día siguiente ventilar bien la habitación que sino olerá a cebolla todo el día.
3. Acostarle con una ligera incorporación.
Para facilitar su respiración es conveniente que lo acuestes un pelín incorporado, para esto tienes varias opciones: Colocarle un cojín bajo del colchón, que duerma con un cojín ergonómico que ya tenga dicha pendiente o bien bajo las patas del cabezal de la cama colocar unos topes, libros o cualquier otro objeto que incline la cama.
4. Nabo y azúcar para calmar la tos seca.
Cuando tengan tos seca nada como el remedio casero del nabo con el azúcar. Para ello cortas nabo a láminas finitas y los introduces en un pequeño recipiente (como una tacita de café o té) luego los cubres con azúcar y dejas reposar durante unas horitas, poco a poco el nabo soltará un jugo que junto con el azúcar se convertirá en una textura tipo miel blanca, dásela a cucharadas cada horita y pronto verás calmada su tos.
5. Reducir de la ingesta de leche de vaca y sus derivados.
Cuando estén muy cargados de mocos intentad evitar la ingesta de leche de vaca y sus derivados, éstos favorecen la formación de flemas, intentad sustituirlo por leche de soja, avena o por zumo de naranja que también les vendrá muy bien.
6. Toallitas húmedas secas como pañuelo de papel para sonarle los mocos.
Dado que cuando están resfriados les sonamos mucho los mocos, terminan con la nariz muy irritada, para que esto no suceda y la limpieza de los mocos sea lo más suave posible, sacad varias toallitas húmedas, /las que soléis utilizar para su higiene diaria), y dejadlas secar durante un par de horas y listas para sonarles los mocos, su suavidad hará que este momento no sea tan incómodo para ellos.
7. Que beban mucha agua y mucha vitamina C
Intentad que durante estas épocas estén bien hidratados, de manera que si beben mucho favorecerán la eliminación de la mucosidad. La aportación de líquidos también es conveniente hacerla con zumo natural de naranja para aumentar la ingesta de vitamina C.
Todos estos remedios los podéis aplicar a vosotros mismos y comprobaréis su efectividad.
¿Conocéis algún otro consejo o remedio casero que pueda ayudar a otras mamis? Lo queremos conocer.